Burnout: cómo es este síndrome del «trabajador quemado» que afecta al 80% de los argentinos
Lejos de ser un mito, la Justicia empieza a fallar a favor de trabajadores con estrés crónico, en un contexto laboral.
Por Rebecca Arakelman
El burnout es el nombre que se le puso al agotamiento del «trabajador quemado». Se trata de un síndrome conceptualizado como resultado del estrés crónico, específicamente en fenómenos en el contexto ocupacional.
Tiene 3 características principales:
- sentimientos de agotamiento o falta de energía
- sentimientos de negativismo o cinismo relacionados con el trabajo
- y eficacia profesional reducida
Lo grave en nuestro país es que la ocurrencia del síndrome de burnout en Argentina es del 80,2%, al igual que en Chile. En Perú es del 72,9% y en Panamá el 53,6%. Los datos fueron revelados por un estudio realizado a fin de año por el portal de empleos Bumeran.
Asimismo, a nivel regional, los usuarios han experimentado en su mayoría estrés, falta de motivación y un agotamiento fuera de lo normal a causa de la carga excesiva de trabajo.
¿Cómo saber si tengo síndrome de burnout?
El estrés laboral suele producir síntomas físicos y psicológicos: dolores de cabeza, dificultades para dormir, dificultades para concentrarse, irritabilidad y problemas digestivos.
Además, el burnout se distingue porque la persona se siente física y emocionalmente agotada (agotamiento), perdió el entusiasmo y la capacidad de identificación con su trabajo (cinismo o despersonalización) y siente una profunda falta de realización personal (ineficacia).
Sin embargo, a veces el burnout se confunde con depresión. Es por eso que es importante resaltar que la diferencia está en la asociación con el trabajo del síndrome de desgaste profesional.
También tiene consecuencias negativas para la organización, porque repercute de mala manera en el clima, suele asociarse con mayores índices de ausentismo y tardanzas, menores niveles de desempeño y productividad, y mayores niveles de rotación.
¿A quiénes afecta principalmente?
El famoso síndrome de burnout es también conocido como síndrome del quemado, síndrome vicario, erosión psíquica o estrés laboral.
Lo sufren, sobre todo, educadores, enfermeros, médicos, docentes, abogados, psicólogos, psicopedagogos y trabajadores sociales, entre otros profesionales.
En general, múltiples operadores en contacto prolongado a lo largo de sus carreras con personas en estado de vulnerabilidad y riesgo.
Síndrome declarado por la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó el síndrome de burnout dentro de la clasificación internacional de enfermedades y la clasificó como un fenómeno ocupacional.
De acuerdo a lo que se explica en la web de la entidad dependiente de la ONU, el burnout incluye «factores que influyen en el estado de salud o en el contacto con los servicios de salud«.
Todos estos elementos incluyen motivos por los cuales las personas se ponen en contacto con los servicios de salud. Sin embargo, todavía no se clasifica el burnout como enfermedades o afecciones de salud.
El truco de Bill Gates para evitar el burnout
La clave de Bill Gates para no aburrirse o hartarse del trabajo es la variedad y el dinamismo.
«¿Estás preocupado por sufrir burnout antes de los 30?«, le preguntó un periodista.
«No«, respondió con seguridad.
«¿Cómo lo sabes?«, le volvieron a preguntar.
«En nuestro trabajo no es que estemos haciendo lo mismo todo el día. Vamos a nuestras oficinas y pensamos nuevos programas, nos juntamos en reuniones, salimos para ver a potenciales usuarios finales y hablar con consumidores. Hay mucha variedad y siempre están pasando cosas nuevas. Y no creo que alguna vez llegue el momento en que esto se torne aburrido«, explicó Gates.
