El cardenal Pironio fue reconocido por el papa Francisco
El Sumo Pontífico declaró «las virtudes heroicas» del recordado teólogo.
Por Gastón Dufour
Si se confirma la curación milagrosa de un niño argentino que se encontraba hospitalizado por haber respirado y posteriormente tragado polvo de cobre, quien recibió el alta completamente curado, se definiría la declaración y luego de la beatitud el siguiente paso será la santidad.
El cardenal Eduardo Pironio fue presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano tras su paso como secretario entre 1967 y 1972, y el primer latino en ocupar diversos cargos de importancia en el Vaticano durante el papado de Pablo VI: integró la Congregación para la Doctrina de la Fe, la Comisión Pontificia para América Latina y la Secretaría permanente del Sínodo de Obispos, además de ser nombrado Proprefecto de la Sagrada Congregación para los Religiosos e Institutos Seculares con sede en Roma.
A principios de los 70 la triple A asesinó a una colaboradora que pertenecía a su diócesis, María del Carmen Maggi y su salida a Roma tuvo que ver con la decisión del Papa de protegerlo del ataque de la asociación armada que comandara José López Rega.
Fue creador de las Jornadas Mundiales de la Juventud que aún se realizan, y tuvo un rol fuerte participando como mediador papal durante el conflicto del Beagle. Nacido en 9 de Julio, provincia de Buenos Aires, el 3 de diciembre de 1920, permaneció en Roma hasta su fallecimiento, en febrero de 1998.
