«Fui rotulado como antidemocrático y, al contrario, siempre jugué dentro de la cancha de la Constitución”. La aparición de Jair Bolsonaro tras perder a manos de Lula.
El primer mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, enfrentó las cámaras y los micrófonos por primera vez desde la confirmación oficial de su derrota en el balotaje del último domingo ante Luis Ignàcio Lula da Silva (50,9 a 49,1%), mandamás del Partido de los Trabajadores. «Seguiré cumpliendo el mandato de la Constitución», declaró, desde el Palacio Alvorada. Aunque a la vez, quebró una tradición del país al no saludar a su oponente.
Bolsonaro permaneció dos días en su residencia oficial ubicada en Brasilia.
El vigente Jefe de Estado irrumpió con un discurso potente: «Voy a comenzar agradeciendo a los 50 millones de brasileños que me votaron. Los actuales movimientos populares son fruto de indignación, del resentimiento y la injusticia de cómo ocurrió el proceso electoral».
En relación al bloqueo de sus seguidores en las rutas del país, expresó sin tapujos: «Las manifestaciones pacíficas siempre serán bienvenidas pero nuestros métodos no pueden ser los de la izquierda y no pueden perjudicar a la población con la destrucción de patrimonio e impidiendo el ir y venir».
Cabe resaltar que en las adyacencias de la residencia, los manifestantes exhortaron a sostener las interrupciones en todo el país por el plazo de tres días mostrando su descontento por los comicios finales, incluso con el aporte de las Fuerzas Armadas.
El aumento de la tirantez producido por los cortes llevados a cabo por camioneros pro Bolsonaro en sitios relevantes de 22 de los 27 estados, se maximizó cuando la policía impulsó el desalojo a través de la fuerza.
Luego, tuvo lugar para hacerse espacio para la reflexión, afirmando que «la derecha surgió de verdad en nuestro país”. Y sostuvo: “Nuestra robusta representación en el Congreso muestra la fuerza de nuestros valores: Dios, patria, familia y libertad. Integramos distintos liderazgos en Brasil y nuestros sueños siguen más vivos que nunca».
Por último, intentó despegarse de la imagen con la que siempre se lo ligó: «Fui rotulado como antidemocrático y, al contrario, siempre jugué dentro de la cancha de la Constitución. Jamás hablé de controlar a los medios o las redes sociales. Como presidente de la República y ciudadano seguiré cumpliendo todos los mandatos de nuestra Constitución».
Por otro lado, Ned Price, portavoz del Departamento de Estado Americano, indicó: “Una seña de identidad de toda democracia es que la voz del pueblo, expresada a través de elecciones, debe ser escuchada y respetada”.
