Gianola y una decisión drástica

En un audio difundido en un programa televisivo, se da a entender que el actor podría atentar contra su vida.

Por Gastón Dufour

A través de un audio presuntamente filtrado, el actor Fabián Gianola expresó su intención de tomar una decisión violenta y determinante contra su persona, dada la situación en que se encuentra debido a las acusaciones de abuso sexual a las que debe hacer frente. «Bueno, chicas, yo hasta acá llegué. Hoy cuando me quedo solo y se va la mucama me (…)» se escucha en el mencionado audio y por respeto al público, la producción del programa «Nosotros a la mañana«, conducido por Sandra Borghi en El 13, decidió que la la grabación fuera interrumpido en ese punto. 

Este hecho se relaciona con el cese de la representación de Fabian Gianola por parte de las doctoras Stella Tomizzi y Evelyn Andriozzi. En el primer caso, la abogada ha dejado de formar parte del grupo de letrados que trabajan en defensa del actor debido a que, según sus propias palabras «tomé la decisión porque se sumó un nuevo abogado (Adrián Tenca) y discrepo con él en cuestiones ideológicas«. En el segundo caso, la renuncia estuvo relacionada a que no se habrían realizado por parte de Gianola los pagos de honorarios debidos.

El caso hasta hoy: acciones por parte del Sindicato de Actores

Luego del pedido realizado por la Asociación Actrices Argentinas , Gianola fue suspendido por el Sindicato de Actores de manera preventiva , hasta que la situación se resuelva definitivamente y la Comisión Directiva se expida al respecto de la situación del acusado.

«Solicitamos a la Asociación Argentina de Actores se retire inmediatamente de su condición de socio y afiliado al mencionado actor, de acuerdo a lo previsto en el Estatuto social que dispone esta sanción en caso de inconducta notoria de un afiliado«, solicitó en su momento la agrupación. 

Mientras tanto, el actor enfrenta aún varias denuncias, las que comenzaron a surgir luego de las declaraciones de Fernanda MenesesViviana Aguirre, seguidas de las de Griselda Sánchez y la de una mujer empleada de un vecino del acusado, ocurrido en 2013, y cuyo nombre no se hizo público. 

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