Independiente quiere volver a ser. Ahora apela al corazón financiero de sus hinchas.

La institución de Avellaneda atraviesa una crisis económica que llega en forma de bola de nieve y bien podría ser un recorte de los problemas estructurales y económicos que signan al país y se repiten de manera cíclica. Las últimas elecciones en el club que depositaron la confianza de los socios en Fabian Doman quedaron atrás. Ahora es tiempo de, luego de diagnósticos como «No nos imaginábamos que la pelea del club con la vida económica era tan grande», empezar a resolver.

Entre una iniciativa para atrapar socios, seducir a sponsors y un fondo común para que los simpatizantes ayuden a la causa, la entidad busca reducir deudas y hacerse de dinero fresco para estar atento a posibles refuerzos de cara a la próxima temporada.

El mandatario electo recalcó, sin tapujos: «Estamos buscando una ingeniería para que todo aquel que quiera aportar, pueda hacerlo mediante un fondo que tendrá como contrapartida el balance de Independiente el día que de ganancias, pero de forma transparente y comunicada».

Otro de los vértices que debe afrontar el club, son los reclamos por deudas que arrastran un largo tiempo. Por caso, el agente de Fernando Amorebieta, Fernando Mazzei, exigió el embargo de los derechos televisivos por la falta de pago de una comisión en el marco de la venta del jugador. Las cifras que pretende son 75.178 dólares, 37.250 euros y 17.146 francos suizos.  

Uno de los reclamos gira en torno al ex técnico Miguel Brindisi, quien aguarda su parte (795 mil dólares) tras la cancelación de su contrato. Lo llamativo es que es una deuda que la entidad lleva en su mochila desde la gestión de Javier Cantero. Sucede que el presidente saliente Hugo Moyano hizo caso omiso en sus ocho años de ciclo. La semana próxima habrá una nueva audiencia.

De todos modos, el tema Cecilio Dominguez es el que quita el sueño. La comisión directiva del América de México no accedió a la oferta del rojo para saldar la deuda y cae de maduro que se activará una inhibición por una cifra de 5.736.000 dólares.Pero el mapa del rojo financiero no termina allí: Se deben abonar 1.250.406,39 dólares y 5 mil francos suizos por Gastón Silva. Por la situación de Carlos Benavidez 171 mil dólares y 50 mil dólares en 11 veces por la deuda con Pablo Hernández. 

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