James Franco reconoció las acusaciones en su contra
El conocido actor admitió las consecuencias negativas de sus actos respecto a sus víctimas.
Por Gastón Dufour
Prácticamente tres años después de las primeras denuncias por abuso sexual recibidas en su contra, James Franco reconoció las consecuencias negativas de sus actos para con las víctimas.
Primeras acusaciones
Entre 2018 y 2019 el actor fue denunciado a través de testimonios publicados en “Los Ángeles Times” de situaciones de abuso ocurridas durante las clases que impartía en su escuela de cine, Studio 4.
Posteriormente a la divulgación de las acusaciones, reafirmadas en 2019 por Sarah Tither-Kaplan y Toni Gaal, el Movimiento #MeToo decidió respaldar a las denunciantes y entonces más mujeres se sumaron a contar su experiencia.
En un principio Franco se abstuvo de realizar declaraciones al respecto, pero en los últimos días eligió dar a conocer su parecer en una entrevista realizada para el podcast The Jess Cagle Show.
En este espacio habló públicamente por primera vez del tema y se escudó en una supuesta adicción al sexo para explicar la motivación de sus acciones. Agregó, además, que sufre desde hace 5 años lo que considera una dolencia y que hasta este momento, en que tiene una relación con determinada persona, no había logrado mantener un vínculo de fidelidad.
Presentación judicial del caso
Entre las denuncias de las alumnas hechas a “Los Angeles Times”, sobresalieron las realizadas por Tither Kaplan, quien mencionó que Franco simuló en una de las clases una especie de orgía con las participantes.
Posteriormente hizo mención irónica en la red social Twitter durante la gala de los Globos de Oro de 2018 respecto de la utilización de Franco de un prendedor con la frase «Time’s Up» (El tiempo se acabó), en una celebración signada por los reclamos contra el acoso a las mujeres en Hollywood. Además, justo en esa premiación el actor fue galardonado por su rol en “The Disaster Artist”.
Reclamos y resarcimientos
En cuanto a la demanda presentada en la Justicia, esta incluía una indemnización a las víctimas a determinar y la entrega del material que se hubiera registrado eventualmente durante la sesión. Según información publicada por The Hollywood Reporter, recientemente se hizo un pago a las víctimas por un valor de 2,3 millones de dólares.
Franco reconoció que el nombre de la clase en la que se centraron las acusaciones fue estúpidamente «provocativo» y que, de ninguna manera, se trataba de «un plan maestro» de su parte, afirmó en la entrevista. “Tuve vínculos que yo entendí consensuados con algunas de las estudiantes y no debí hacerlo”, finalizó ante su interlocutor.
