«Nos desvela la inflación». José Ignacio de Mendiguren y la preocupación del gobierno.
La situación económica en Argentina impacta a latigazos en el ánimo social. La decepción se ha tornado moneda corriente entre índices que hacen empujar la olla hacia límites insospechados. Ante este doloroso escenario, las elecciones primarias y las presidenciales de octubre van perfilando un considerable peso.
Y entre los partidos es tan confuso el panorama que las grietas internas, tanto en el Frente de Todos como en Juntos por el Cambio, derriban cualquier atisbo de solidez. En medio de esta coyuntura, tal vez Milei sea el principal favorecido en el río revuelto.
Sin embargo, el oficialismo no se dará por vencido fácilmente. Al menos eso es lo que propone el Secretario de Producción José Ignacio de Mendiguren.
Para el diputado nacional entre 2013 y 2021 «la dificultad más compleja del país es que la plata no alcanza”. Además, se hizo un espacio para fustigar la bomba económica que pronosticó Juntos por el Cambio la semana anterior. “Este modelo productivo tiene los índices de desocupación más bajos de los últimos años”, remarcó.
En ese sentido, destacó que ese tipo de frases “contrastan con la realidad de crecimiento de la actividad económica y recuperación en el mercado laboral».
El «Vasco» subrayó que “en 2001 dejaron un país con 18 monedas de circulación, truque y una crisis política con diez presidentes en diez días”. Mientras que “en 2019 dejaron un país con default en pesos y en dólares, sí o sí había que renegociar con el FMI porque era impagable lo que habían firmado”.
“El gobierno se encargó de desarmar esas bombas: fue al FMI, negoció con el Club de París, con los acreedores privados. ¿Quién es especialista en dejar bombas y quién en desarmarlas?”, dejó boyando el interrogante.
Además, de Mendiguren afirmó: “Nos desvela la inflación y convocar a las paritarias y al Consejo del Salario para que no se siga perdiendo la suba de precios. Nos preocupa. Esto sucede entre otras razones porque en la temporada hubo un movimiento de turismo y abusos de precios, el límite lo pone muchas veces la capacidad de compra de la gente”.
En esa dirección, puntualizó en “cuestiones estacionales”, pero recalcó que “no se debe abandonar la lucha para bajar la inflación”, al tiempo que vinculó la disparada de los precios a la especulación de “mucha gente de capitales importantes que apuestan a la devaluación desde agosto”.
