Para Martin Redrado “los pesos nos queman en las manos y los tenemos que gastar por la inflación”.
Quien alguna vez fuera presidente del Banco Central realizó una observación del escenario económico que se aproxima y en ese sentido estableció un proyecto que incluye cinco leyes afin de normalizar la economía.
“La gente no ahorra, todo peso que entra lo quiere gastar porque no hay reserva de valor. Yo recomiendo comprar todo a principio de mes porque a los 15 días todo va a estar más caro. Los pesos nos queman en las manos y los tenemos que gastar por la inflación”, reveló.
En relación al panorama laboral y su impacto en los sueldos, señaló que “en este trimestre el salario de los trabajadores privados registrados va a caer con respecto al cuarto trimestre del año pasado un 7%; en los trabajadores informales cae lamentablemente el doble”.
Luego, Redrado planteó una solución de su equipo económico: “Al peso hay que salvarlo con leyes que den previsibilidad. Una ley que le dé al Banco Central independencia para no estar emitiendo billetes para financiar al sector público”.
Otro de los vértices de su enfoque abordó la nula llegada al crédito internacional: “Solo tenemos crédito doméstico y la emisión de pesos que nadie quiere. Llegó la hora de la verdad, si no planteamos un programa para estabilizar la economía, bajar la inflación, hacer que el salario valga y un programa de crecimiento, estamos complicados. Argentina tendría que plantear retenciones cero para todo el aumento de exportaciones que tengas hacia adelante”.
El ex titular del BCRA graficó que “por ejemplo, producís 100 toneladas de soja por año y exportás 100, si el año que viene exportás 110, sobre las 100 pagás las mismas retenciones pero sobre las 10 pagás cero”.
En definitiva, las solución del ex funcionario pasa por la implementación de cinco leyes fundamentales: “Primero una ley para darle independencia al Banco Central; segundo, en material fiscal y de gasto público desindexar y que todas las variables de gasto público tengan un crecimiento igual y una escalera descendente a cinco años, en 2023 el gasto público tiene que crecer al 50%, al 40% en el 2024 y llegó a una inflación de un dígito en 2026″.
Y finalizó apuntando al objetivo de “simplificar los impuestos, modernizar nuestro sistema impositivo y bajar impuestos. Aplicando una ley nacional de infraestructura. Con eso, cambiás la Argentina”.
